Salud

Covid-19: las reinfecciones, el nuevo escenario de la pandemia

¡Compartir es demostrar interés!

Las vacunas llegaron más temprano que tarde y las autoridades fueron aflojando las restricciones. En algunos casos, la idea que primó fue alcanzar la “inmunidad de rebaño” con la campaña de vacunación y la inmunidad generada tras las olas de contagios. La esperanza era que la persona vacunada y/o contagiada ya no se volvería a infectar. Pero la evolución del coronavirus sorprendió.

LAS PERSONAS VACUNADAS AÚN SE PUEDEN INFECTAR

Los casos de personas contagiadas tras haberse vacunados con dos y hasta tres dosis se volvieron más frecuentes con el surgimiento de la variante Ómicron. Esta versión del virus, en sus diferentes subvariantes (BA.1, BA.2, etcétera.), es la que predomina en todo el mundo.

Por lo tanto, es de esperar que sigan ocurriendo casos de infección tras vacunación, sobre todo a medida que la inmunidad que proveen las dosis se desvanezca en el tiempo.

MÁS REINFECCIONES DE SARS-COV-2

En Sudáfrica se estima que el 60% de la población ya se infectó más de una vez. En Reino Unido, las reinfecciones eran el 1% de los casos en noviembre, pero ahora ya son el 10%.

La mayor tasa de reinfección se explica por una razón matemática: la mayoría de las personas ya tuvo Covid-19 una vez; entonces, entre los nuevos infectados habrá una mayor proporción de recontagiados.

Pero también por una doble razón inmunológica: una baja en los niveles de anticuerpos de las personas y una mayor habilidad de la variante Ómicron para eludir esas defensas.

HERRAMIENTAS PARA ESTA ETAPA DE LA PANDEMIA

Lejos de haber alcanzado la inmunidad de rebaño, varios expertos plantean que comenzamos la etapa de reinfección de la pandemia. ¿Qué herramientas tenemos para atravesarla?

Vacunas. Las vacunas actuales todavía no perdieron su capacidad para protegernos frente a eventuales cuadros graves o muerte. Hay que lograr altos niveles de cobertura con tres dosis y pensar en la necesidad de aplicar una cuarta en grupos vulnerables.

Los centros de vacunación ya no están a la vuelta de la esquina. Ahora los cordobeses deben peregrinar para conseguir turno. Lograr una buena comunicación sobre dónde y cuándo se vacuna es vital para evitar que las personas desistan de inmunizarse.

Test. Los test de antígenos permiten diagnosticar rápidamente los positivos. Ahora los hisopados están sólo limitados a las instituciones de salud y a los casos sintomáticos. Pero acceder a un testeo rápido es clave para aislar positivos y frenar brotes.

Barbijos. Las conocidas medidas de prevención (barbijo, distanciamiento y ventilación) siguen siendo infalibles, pero ya prácticamente no se aplican, ni siquiera en los espacios cerrados de más riesgo.

POR QUÉ NO HAY QUE DESCUIDARSE

Si bien el virus ahora “mata menos” que antes, el Covid-19 sigue siendo un patógeno de alto riesgo en los grupos más vulnerables. Además, es una enfermedad nueva que resta horas laborales y puede poner en jaque las cadenas productivas.

Resulta difícil pensar que este escenario cambie para mejor. En el corto plazo no se esperan vacunas esterilizantes, que prevengan el contagio. Y los nuevos tratamientos que se aplican en el hemisferio norte parecen inalcanzables para los presupuestos de salud de países como Argentina.

Nuestro país ya atravesó una poderosa ola de Ómicron a principios de año. El efecto positivo es que seguramente “inyectó” defensas frescas en una parte de la población.

No obstante, el mayor temor es que surja una nueva variante con la misma capacidad de transmisión de Ómicron, pero que eluda por completo la inmunidad provista por las vacunas, hasta el punto de que tampoco nos protejan contra los cuadros graves.

Vacunados y recuperados no deben pensar que la pandemia ya pasó. Hay riesgo de contagio. Y las autoridades sanitarias deben seguir alertas en esta etapa de reinfección y preparar una respuesta rápida si el escenario empeora.

LA VOZ

Escribinos
Dejanos Tu Mensaje
La Radio 102.9
Hola!!
Dejanos tu Mensaje