Agro

Leche 4.0: el tambo robotizado de una cooperativa cordobesa que producirá 40 mil litros diarios

¡Compartir es demostrar interés!

Esa tendencia, más allá de los números oficiales, preocupa a productores lecheros –que son los primeros damnificados– y también a la industria láctea, porque observa cómo la producción nacional se mantiene estable, entre los 10 mil millones y 12 mil millones de litros por año, desde 2008.

A partir de percibir como cada año había un menor número de tambos, la cooperativa Manfrey, ubicada en Freyre, comenzó en 2018 a relevar los motivos que fundamentaban el cierre de establecimientos. Entre ellos estaban, con mayor peso, la falta de una continuidad generacional para mantener la producción y los problemas de rentabilidad del negocio.

TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)
TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)

Con este diagnóstico, la cooperativa se propuso buscar alternativas para mitigar esos efectos negativos en el sector y generar una herramienta para que los productores puedan continuar en la actividad y hacerlo con crecimiento.

“Para hacer un diagnóstico, necesitábamos información; y para obtener esa información, hicimos una encuesta en la que básicamente había tres aspectos para analizar: los productivos, los aspectos económicos y los sociales, entre ellos, cómo era la composición familiar, teniendo en cuenta que son empresas familiares”, aseguró a Agrovoz Ercole Felippa, titular de la cooperativa láctea cordobesa.

A partir de una encuesta sobre 100 tambos socios de la cooperativa, de la cual respondieron 60, la primera impresión que dejó el sondeo fue lo mal que estábamos en la producción; y la segunda, cuánto había por hacer, recordó el industrial.

EL TAMBO COMO EXPERIENCIA ASOCIATIVA

El primer dato que quedó de manifiesto fue la enorme brecha productiva, con tambos en los cuales la productividad era de hasta 15 mil litros de leche por hectárea al año y, alambrado o camino rural de por medio, otros producían entre cuatro mil y cinco mil litros por hectárea, lo que dificultada sobremanera su continuidad en el negocio.

La encuesta también mostró, por ejemplo, la carencia de indicadores reproductivos en los rodeos, lo que evidenciaba una falta de programación adecuada para darle previsibilidad a la producción.

Dentro de las preguntas del cuestionario, la cooperativa incluyó una que se refería a la predisposición del productor a formar una figura asociativa. Muchos contestaron que sí.

“A partir de esta inquietud puesta de manifiesto por los asociados, comenzamos a analizar modelos en los cuales por afinidad se repartieran la producción de leche y la recría, y que otros produjeran los alimentos”, agregó Felippa.

TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)
TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)

Sin embargo, cuando se los convocó, la respuesta fue negativa. Por diferentes motivos, “todos valederos y vinculados a la continuidad del negocio a lo largo del tiempo”, la propuesta fue desestimada.

La contrapropuesta de los productores fue tomar parte de un proceso asociativo, pero liderado por Manfrey.

En forma paralela al seguimiento de sus asociados, la cooperativa venía desarrollando un plan estratégico 2020/2025, que ahora se extendió hasta 2030. Uno de los objetivos del programa plurianual es que un porcentaje de la leche que industrializa sea abastecido por la propia cooperativa.

“Y vimos ahí la posibilidad de complementar ambas iniciativas. Ahí surge el proyecto de la construcción de un megatambo en el cual el capital de trabajo –las vacas y el alimento– sea provisto por los productores, a través del pago de un alquiler por parte de la cooperativa”, describió el industrial.

TAMBO ASOCIATIVO: VACAS Y TIERRAS EN ALQUILER

Desde hace algunos años, y bajo un sistema de producción convencional, la cooperativa viene desarrollando un modelo asociativo en cinco tambos, con el alquiler de tierras y de animales.

Precisamente, en un predio sobre el cual la usina láctea tenía en funcionamiento un tambo convencional, camino a Rafaela, al que se agregaron 30 hectáreas más, la cooperativa lleva a cabo la construcción de un tambo que incluirá cuatro módulos de producción de leche bajo un modelo estabulado.

Luego de analizar diferentes opciones para el diseño del establecimiento asociativo, se concluyó que la mejor forma era adoptar un sistema de free stall, con cama de goma y con ordeñe robotizado.

“La otra opción analizada fue hacer un tambo ‘calesita’, pero la inversión inicial era muy grande y la infraestructura iba a estar ociosa por un tiempo”, justificó el titular de la cooperativa.

Además de sostener que el ordeñe voluntario, como es el sistema por robot, representa un cambio en los paradigmas tradicionales de la actividad, ya que no sólo permite obtener una mayor productividad individual por vaca, sino que, por sobre todas las cosas, “humaniza” la tarea del tambero, que históricamente se destacó por no tener días libres.

El primer módulo para 300 vacas ya comenzó a funcionar en marzo con un total de 120 animales y se proyecta que estará en régimen en octubre. “A medida que van pariendo las vaquillonas, van ingresando; y proyectamos que en octubre estará trabajando el módulo en su totalidad”, anticipa Felippa.

LOS ROBOTS, COMO PARTE DEL MODELO INTENSIVO

En las instalaciones bajo galpón, el rodeo de producción tiene todas las comodidades de bienestar animal. Son las vacas las que deciden cuándo quieren ser ordeñadas: el promedio actual es de 2,8 veces por día.

Para ello, cuenta con un collar electrónico que, además de accionarle la apertura y el cierre de las distintas puertas de las instalaciones, permite recolectar gran cantidad de información.

El primero de los módulos está equipado con cuatro robots que, cuando estén completos, ordeñarán cada uno alrededor de 75 vacas por día.

TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)
TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)

En cuanto al promedio individual de producción de leche, su cálculo se dificulta debido a que las vaquillonas están en período de parición. Por lo pronto, aquellos animales que parieron hace un mes están aportando 45 litros por día.

¿Cómo es la vinculación que tienen con los tamberos con ese modelo asociativo? “Hay de todo. En la mayoría de los casos, aportan tierra para poder producir alimentos; y en otros, las vacas por las que se paga de manera inicial un alquiler”, revela el industrial.

Las vaquillonas que hoy están en el primer módulo son propiedad de Manfrey. “La cooperativa tiene en la actualidad seis tambos, donde hay animales que están en alquiler y que luego de un período de tiempo transcurrido se paga un valor residual para su adquisición definitiva; además del pago del alquiler de la tierra para el alimento”, indicó.

TAMBO ASOCIATIVO; EL PRIMER MÓDULO DE CUATRO

Además, la empresa cuenta con un criadero cooperativo de terneros, donde se crían los animales y se recrían las vaquillonas, con el objetivo de devolvérselas al productor a punto de parir.

“De esa manera, el productor tiene en el campo categorías productivas, que son las que le van a permitir crecer en producción”, agregó.

TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)
TAMBO ASOCIATIVO. El módulo para 300 vacas de la cooperativa Manfrey con robot de ordeñe. (Gentileza Manfrey)

A partir de su iniciativa trazada de producir también su propia materia prima, Manfrey genera en cinco tambos tradicionales –más el robotizado– un total de 45 mil litros diarios de leche.

El objetivo es llevar ese volumen a 90 mil litros diarios, lo que se lograría cuando funcionen los cuatro módulos con 1.200 vacas en ordeñe. No toda la producción propia tendrá como fuente al tambo robotizado.

Si bien la meta de la cooperativa era construir este año el segundo módulo y dejar para 2024 el tercero y el cuarto, la incertidumbre económica y el impacto de la sequía en la producción postergaron los plazos. “Cuando haya previsibilidad, con financiamiento a largo plazo, se completarán las instalaciones”, aseguró Felippa.

LA VOZ

Escribinos
Dejanos Tu Mensaje
La Radio 102.9
Hola!!
Dejanos tu Mensaje